El 6 de septiembre de 1930, el General José Félix Uriburu encabezó un golpe de estado que derrocó al gobierno constitucional de Hipólito Yrigoyen y estableció una dictadura militar, la primera de una serie que se extendería hasta 1983. El Diario Critica, de Natalio Botana, apoyó el Golpe de Estado y fue el principal critico del gobierno constitucional de Yrigoyen.
El dictador Uriburu estableció un régimen represivo que incluyó por primera vez la utilización sistemática de la tortura contra los opositores políticos y sindicalistas mediante la creación con ese fin, de la Sección Especial de la Policía Federal.
Al hijo del escritor Leopoldo Lugones, llamado Polo Lugones, se le adjudica la introducción en Argentina de la "picana eléctrica", instrumento preferido de los torturadores. Polo Lugones era el Jefe de Policía del régimen dictatorial de Uriburu.
A principios de 1931 llamó a elecciones en la provincia de Buenos Aires, pero luego las anuló debido a que había ganado la Unión Cívica Radical. Recordemos que en 1962, el gobierno fraudulento de A.Frondizi (elegido gracias a las ubicuas proscripciones) tambien anularía las elecciones en la Provincia de Buenos Aires por que en ella habían ganado los peronistas. Volviendo al gobierno dictatorial de Uriburu, en noviembre de 1931 convocó nuevamente a elecciones para ubicar en el poder al General Agustín P. Justo; claro que para esto antes prohibió las candidaturas del radicalismo. Nuevamente igual a lo ocurrido 32 años después cuando el radical Illía gana las elecciones en que se ha proscripto la participación de un Frente Popular peronista que las encuestas daban por triunfador. El dictador Uriburu y el beneficiario del fraude: A.P.Justo.
A partir del golpe de 1930, las fuerzas armadas se convirtieron en un actor decisivo de la vida política argentina, ejerciendo presiones, proscribiendo personas y partidos y, más directamente, interrumpiendo por la fuerza gobiernos constitucionales y usurpando el poder político para instaurar regímenes dictatoriales. A partir de la derrota en la Guerra de Las Malvinas, la pérdida de prestigio de las Fuerzas Armadas ha permitido el fortalecimiento de las instituciones políticas y la sociedad civil .
Debemos recordar los episodios que hicieron naufragar el primer intento de desarrollo democrático a fin de que los mismos no vuelvan a ocurrir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario